Llegaron las
semifinales, y con ellas ese emparejamiento, ya no solo a nivel de selecciones,
a nivel mundial ahora también, en la mayor competición por clubes, Alemania se enfrentaría a España por la supremacía del fútbol
mundial, aunque esta vez tuvo un final muy distinto, si a nivel de selecciones España es la clara dominadora de este
juego, a nivel de clubes los bávaros demostraron, no sé, si en cuanto a calidad
futbolística, pero si en cuanto a mentalidad ganadora, que la Bundesliga progresa a pasos agigantados
y quiere disputarle el honor también a España
de poseer la mejor liga del mundo.
En el Allianz Arena iniciaría el primero de
los encuentros, un Barça que acumula
muchas dudas llegaría a tierras alemanas con la idea clara de sacar un buen
resultado y que no volviera a ocurrir lo que en rondas atrás frente al AC Milán. Para ello contaría con un Leo Messi "recuperado", con
un Villa al que se le concedieron
partidos de liga para coger la forma, y con grandes bajas en la zaga que solventarían
con la mas que sorprendente inclusión de Bartra
en el eje de la zaga. Empezando por que el astro argentino, recorrió la
irrisoria cifra de 7 km en el total del partido y la gran mayoría andando, me
hace dudar sobre su real estado físico y me baso en estadísticas, por que las
continuas pérdidas de balón y esas arrancadas sin chispa, ya me lo indican si
necesitar datos objetivos. La decisión de dejar a Villa en el banquillo y al que viene siendo el mejor del equipo en
las últimas jornadas ligueras en la grada, me parece una decisión discutible, y
la inclusión de un central poco experimentado al que no se le han dado
oportunidades en el campeonato local, provoco lo que sin duda fue un "rodillo" alemán.
Si en las últimas
jornadas de esta competición vengo avisando de la máquina tan engrasada que
poseen los bávaros, no dejaron de demostrarlo, pero a todo esto añadieron la
inteligencia táctica de un entrenador, que puede conseguir un triplete y al que
han mandado al paro, o a la jubilación según algunos, sin ni siquiera llegar al
último tercio de temporada. El Bayern
tenía las cosas muy claras y fruto de esto llego el primer gol donde se
impusieron las torres de München, y
el que viene siendo el más listo dentro del área en los últimos tiempos, empujó
el balón a placer. Todo el partido transcurrió igual, con un Barça intentado su juego de posesión y
ataque combinativo, pero sin lograr cruzar el mediocampo con un ritmo
suficiente para inquietar al Bayern.
Y en otra acción ensayada los teutones colocaron el balón al segundo palo, en
la zona más débil de los azulgrana a balón parado, y otra vez el más listo, le
colocó el balón a un Mario Gómez que
volvía a la titularidad a causa de las sanciones y que demostró que aun sigue
teniendo la pólvora bien preparada. A partir de aquí todo fue en el mismo
cauce, el único que se desvió de este guion fue el árbitro, si bien los dos
goles anteriores han sido protestados, el primero no me parece falta, y en el
segundo me falta mucha vista para apreciar el fuera de juego, por eso puedo
disculpar el error. Pero ante la jugada de otra vez el más listo facilitando el
gol de Robben con un bloqueo digno
de Omer Asik, no hay duda que es un error importante, pero desde la ciudad
condal, es mejor no centrarse en eso pues el árbitro perdonó una clara expulsión
al lateral de Hospitalet, y en la primera parte un claro penalty a favor de los
locales. Con el partido ya acabado otra vez el destacado de la noche Thomas Müller, acabó con un equipo, que
mucho tendrá que cambiar para llegar a Wembley,
y esperemos que con un Messi recuperado,
pero esta vez de verdad. Mención aparte, al único cambio, el de Villa en el min. 83 después de que les
controlaran el partido completamente y no hubiera ni un tiro a puerta por parte
del conjunto visitante, y que ni siquiera hubiera más jugadores calentado. Quizás
alguien debería hacer autoanálisis, si es cierto lo dicho en rueda de prensa
del cansancio acumulado…
En la otra región
de Alemania el partido no resultaría
muy distinto, aunque mucho tienen que agradecer a sus rivales por enseñarles el
camino, y pienso dar alas a que una ilusión y un sueño se hicieran realidad. Si
alguien remo más que nadie para que se cumpliera ese sueño, es ROBERT LEWANDOWSKI jugador al que vengo
destacando en las anteriores crónicas y que por si había algún incrédulo, se
encargó de demostrar que los halagos están mas que bien merecidos.
Aunque en este
partido nos encontraríamos con diferencias claras respecto a la otra
eliminatoria, pues los goles encajados por los de la capital fueron en momentos
muy claves, que te marcan el transcurso del partido. Al igual que en Barcelona se cometieron varios errores
de bulto, como opinión personal, la vuelta de Özil (el jugador que marca los desequilibrios con permiso de CR7 en este equipo blanco) a la banda es cuestionable, y mas cuando en muchas
ocasiones se ha probado este plan y no ha resultado, por no decir que Modric arrastraba molestias por las que
era duda para el partido, y al final se coló en el 11 inicial. La actuación
de Pepe solo es achacable a él
mismo, pero volvemos a la falta de ritmo provocada por falta de juego y por las
lesiones que viene arrastrando. Y si a esto le sumamos que El Santo esta en el banquillo, sin desmerecer la actuación de un Diego López que está realizando
actuaciones sobresalientes, pero digo yo que si tengo al mejor portero del
mundo en mi plantilla, lo lógico sería sacarlo. Aun así repito que los goles psicológicos
que se marcaron, llevaron al equipo
blanco a perder bastante la organización defensiva y en transiciones que
tanto éxitos les ha dado, y aunque lo contrarrestó el que nunca se cansa de
meter goles, con un gol también bastante psicológico, tuvo que ceder por fuerza
mayor el cetro de hombre gol, a un
polaco que se encargo de materializar, ya no las ocasiones que se creaban, si
no los balones que aparecían por su lado, y con eso llegar a la cifra de 4
goles en una semifinal europea frente al equipo mas laureado por esta competición
precisamente. A parte de esto hay que destacar que el resultado se me antoja
corto para lo que se vio en el rectángulo de juego.
Y al igual que
sus acérrimos rivales, en la casa blanca
deberán plantearse muchas cosas si de verdad pretenden que el mensaje que se transmitió
desde Alemania, sea algo más que
eso, un simple mensaje populista.
Yo desde mi silla
de escritorio deseo de verdad que los dos equipos consigan sus objetivos, pero
lo que deseo mas sin duda, es que cada aficionado se centre en su equipo, y no
en el del rival, pues la envidia es un buen aliciente, pero es un combustible
que se agota bastante rápido y que solo provoca este tipo de situaciones que ya
se repitieron el año pasado, esperemos en este con diferente final.
Auf wiedersehen,